Otro póster que hice con mucho esfuerzo. Me tomó meses, porque me cuesta mucho dibujar bien a Egon, y parece que este es el primer dibujo que realmente le hace justicia. Está cargado de significado, al igual que el póster de Ruiner de Randolf.
«Disciplinado en el cuerpo, puro en la sangre. El hombre auslerio ideal ha reemplazado a Dios: camina por la senda de la fuerza y la virtud, intacto ante la corrupción.»

Egon Falkanger es ese hombre ideal, exaltado por la nación, desgarrado por quienes lo veneran.